Roberto Fernández Suárez
Introducción
En el primer tercio del siglo XX, San Sebastián de los Reyes era una pequeña población rural, de las muchas que rodeaban a la capital. Su población se dedicaba, en su gran mayoría, al sector agrícola. La extensión de su término municipal no era especialmente amplia lo que dificultaba la presencia de grandes extensiones de tierras en manos de unos pocos hacendados, de tipo latifundista. Al contrario, destacaba la presencia de propietarios de pequeñas fincas y huertas. La gran mayoría de ellos no superaba una hectárea en propiedad mientras que los propietarios más pudientes sumaban muchas fincas pequeñas, dedicados sobre todo a la tierra y labor así como para viñas y huertas1.
Roberto Fernández Suárez
Introducción
En el primer tercio del siglo XX, San Sebastián de los Reyes era una pequeña población rural, de las muchas que rodeaban a la capital. Su población se dedicaba, en su gran mayoría, al sector agrícola. La extensión de su término municipal no era especialmente amplia lo que dificultaba la presencia de grandes extensiones de tierras en manos de unos pocos hacendados, de tipo latifundista. Al contrario, destacaba la presencia de propietarios de pequeñas fincas y huertas. La gran mayoría de ellos no superaba una hectárea en propiedad mientras que los propietarios más pudientes sumaban muchas fincas pequeñas, dedicados sobre todo a la tierra y labor así como para viñas y huertas[1].